Carta a Maridomingi y Olentzero

Querida Maridomingi y Olentzero:

Este año escribimos nuestra carta en forma de sueño, porque queremos que nos ayudéis a hacer un Barakaldo más accesible y transitable, tanto en el centro como en sus barrios. Así que allá vamos, ¡a ver si lo conseguimos!

En primer lugar, os pedimos zonas de recreo para las y los más txikis. Es importante que sean parques inclusivos, donde los columpios y juegos estén adaptados para que todas y todos los niños puedan jugar independientemente de su forma de hacerlo. Este parque no debe tener arena, ni ningún tipo de obstáculo que dificulte su acceso.

Por otra parte, querida Maridomingi y Olentzero, como sabéis, a todas las vecinas y vecinos, sea cual sea nuestra condición, nos gusta andar y pasear por Barakaldo. Para ello es necesario que los pasos de cebra que tenemos ahora en el municipio tengan el suelo podotáctil, con luces y semáforos sonoros para que todas las personas nos podamos mover sin que nos pille un coche. Los rebajes tienen que estar a cota 0 y sin pivotes que dificulten el paso. Además, los ascensores que está construyendo el Ayuntamiento deberían ir con sistema de voz para saber si subes o bajas.

También nos gustaría que gente que conocemos, como Eneko y Julia, que se comunican de manera diferente, no se volvieran a perder por Barakaldo, porque ya contáramos con letreros con pictogramas, en braille… que les indicasen dónde quieren ir. Y, por supuesto, cuando vayan al Ayuntamiento a buscar cualquier tipo de información, ésta debe ser accesible para garantizar su participación y no infantilizarles.

Os pedimos todo esto porque ya sabéis cómo funciona este Ayuntamiento. Para empezar, anunciaron a todo el mundo que en el Polideportivo de Lasesarre había ya un espacio adecuado a las necesidades de todas las personas, para cambiarse el bañador, por ejemplo. Pero si todavía no cuenta con una silla hidráulica para bajar al agua, ¿de qué nos sirve? A ver si para el año que viene nos contáis que ya podemos utilizar la piscina y cambiarnos de ropa, sin importar nuestras características. Ellos nos han dicho que para la primera semana de enero, veremos.

Además, por si esto no fuera suficiente, el Ayuntamiento ha querido poner en marcha un Plan de Accesibilidad. Ya en su presentación pudimos comprobar que la exposición no fue accesible en ninguno de los sentidos, lo cual es, cuando menos, curioso. Asimismo, no han contado con la colaboración y aportaciones de quienes más lo necesitan, lanzando ahora una encuesta para justificar lo que ellos entienden por participación ciudadana.

Sabemos que tenéis muchos encargos, pero esperamos que podáis traer todo lo que pedimos para garantizar que los y las barakaldesas disfrutemos de un Barakaldo mejor, sin olvidar el mensaje que debería llegar al Ayuntamiento, que poner rampas no es sinónimo de hacer un municipio accesible.


Mariví Freire
Barakaldoko Ahotsak